Las habitaciones eran lo suficientemente espaciosas. El hotel tenía una ubicación estupenda, en el mar Negro. - Estaba justo al lado de buenos restaurantes y de un bar en la playa. - Me ha gustado muchísimo mi estancia.

La habitación era bien equipada y enorme con un balcón y una bonita vista y tenía todo lo que queríamos.

Ubicación: el hotel estaba lo suficientemente cerca de la playa y los restaurantes, del centro de la ciudad y de buenos restaurantes. Además, pudimos visitar el Monasterio de Aladzha, que estaba a 15 minutos en coche. La habitación es enorme, tiene un baño limpio y un minibar, un televisor de pantalla plana y una zona de estar. El desayuno continental ofrecía un montón de comida, para todos los gustos.

Este hotel es sorprendente considerando el precio. Está ubicado en las afueras de la ciudad, lo cual lo hace más tranquilo y relajante. Además, tiene un ambiente familiar y las habitaciones son espaciosas, incluso cuentan con un bonito balcón.

Todo estuvo bien, ninguna queja.

El hotel es estupendo, se encuentra en un edificio bonito con vistas a la calle. Tenía habitaciones impecables y lo suficientemente espaciosas con un minibar, una caja fuerte y una zona de estar. La atmósfera del hotel es tranquila. Los servicios son excelentes, tienen una piscina muy limpia. Por supuesto, dispone de WiFi gratis en las habitaciones.

Habitaciones grandes y limpias. Sábanas limpias.- Baño limpio.- Buena ubicación cerca de la playa y restaurantes.- Zona tranquila.- Habitaciones con vista al mar Negro.- Hotel económico y acogedor.- Piscina limpia y bien cuidada.

Nada, todo bien.

El hotel está en una ubicación muy cerca de la playa, lo que hace que sea fácil acceder al mar Negro y disfrutar del sol y el agua. Además, está cerca de todo, lo que facilita explorar y visitar los diferentes lugares de interés en los alrededores.

Algunos huéspedes mencionaron que el desayuno es básico y podría mejorar en cuanto a variedad y calidad.